Todos hemos enfrentado el desafío de los puntos negros, una de las preocupaciones cutáneas más comunes. Afortunadamente, debido a su prevalencia, existen numerosas opciones disponibles para tratarlos eficazmente.
Los puntos negros son en realidad poros obstruidos que parecen más dilatados de lo normal debido a un exceso de sebo en su interior. Cuando este sebo entra en contacto con el aire, se oxida, adquiriendo ese característico color negro visible en la superficie de la piel.
Estos puntos negros suelen aparecer en áreas con alta concentración de glándulas sebáceas, como la zona T del rostro (frente, nariz y mentón). Aunque no representan un riesgo grave para la salud, pueden ser molestos y afectar la apariencia de la piel.
Para combatir estos molestos poros negros, es fundamental basarse en tres pilares clave: exfoliación, doble limpieza e hidratación. Aquí te explicamos cómo cada uno de estos pilares puede ayudarte a despedirte de los poros negros de una vez por todas.
- Exfoliación: la exfoliación regular es esencial para eliminar las células muertas de la piel que pueden obstruir los poros y contribuir a la formación de puntos negros. Utiliza exfoliantes químicos suaves, como aquellos que contienen ácido salicílico o ácido glicólico, para disolver el exceso de sebo y desobstruir los poros sin causar irritación.
- Doble limpieza: la técnica de la doble limpieza consiste en usar primero un limpiador a base de aceite para disolver el maquillaje, el protector solar y las impurezas liposolubles, seguido de un limpiador a base de agua para eliminar el sudor, la suciedad y los residuos restantes. Esta práctica asegura que la piel quede completamente limpia y los poros libres de obstrucciones que pueden llevar a la formación de puntos negros.
- Hidratación: mantener la piel bien hidratada es crucial, incluso si tienes piel grasa. El uso de un hidratante adecuado ayuda a equilibrar la producción de sebo, lo que puede prevenir la obstrucción de los poros. Opta por productos hidratantes no comedogénicos que no agraven el problema de los puntos negros.
Al integrar estos tres pilares en tu rutina diaria de cuidado facial, estarás en el camino correcto para lograr una piel más limpia, suave y libre de puntos negros. Byoode ofrece una gama de productos específicamente diseñados para ayudar en cada uno de estos pasos esenciales, garantizando resultados óptimos.
Exfoliación, el mejor antídoto para los poros negros
Todos los expertos coinciden en que lo mejor para evitar los poros negros es una correcta exfoliación. Al exfoliar la piel, conseguimos quitar la capa de células muertas en la que más dilatado puede apreciarse el poro y con más cantidad de sebo. Además, en este gesto, podemos conseguir mucho más que eliminar esa capa de piel envejecida. Si exfoliamos con hidroxiácidos, también suelen tener un efecto sobre el poro y ayudan a que los puntos negros desaparezcan y, después, tengan más difícil reaparecer.
Ácidos como la gluconolactona, además de retirar la grasa que haya presente en el poro, eliminando el punto negro, también ayudan a seborregular. Al hacerlo, permiten que produzcamos menos grasa y, por tanto, que se tarde más en acumularse o que, incluso, no logre hacerlo. La exfoliación regular, ya sea química o física, es esencial para mantener los poros negros a raya.
Exfóliate con Adzuki & Ragi Fantasy
Puedes encontrar gluconolactona en el exfoliante en polvo Adzuki& Ragi Fantasy. Con textura de fina arena y color de duna del desierto, contiene en su interior polvo de arroz, harina de habas de adzuki y ragi, gluconolocactona (un polihidroxiácido de exfoliación suave) y ácido fítico, que prevenirla y reducir la producción de melanina.
Doble limpieza: el secreto para una piel libre de poros negros
La técnica de doble limpieza es especialmente eficaz para combatir los poros negros. Este método consiste en utilizar primero un limpiador de base oleosa y luego uno de base acuosa, asegurando así una limpieza profunda y completa.
Limpiador de base oleosa, como Metamorphosis of Narcissus
Este tipo de limpiador ayuda a disolver el sebo, el maquillaje y las impurezas que se acumulan en la superficie de la piel. Al utilizar un aceite limpiador como Metamorphosis of Narcissus, podemos eliminar eficazmente estos residuos sin resecar la piel.
Limpiador de base acuosa, como Super Green Poem
Después de usar el limpiador oleoso, es el turno del limpiador acuoso, como Super Green Poem de Byoode. Este paso elimina cualquier residuo de aceite y limpia los poros más profundamente, asegurando que la piel quede completamente limpia y libre de impurezas. Super Green Poem es un gel limpiador con poder antioxidante.
La doble limpieza es particularmente útil para quienes tienen problemas de poros negros, ya que garantiza una limpieza más efectiva y profunda.
Hidratación adecuada para prevenir los poros negros
El último pilar, pero no menos importante, es la hidratación. Mantener la piel bien hidratada es crucial para evitar que los poros se obstruyan con exceso de sebo. Una piel deshidratada tiende a producir más aceite para compensar la falta de humedad, lo que puede llevar a la formación de poros negros.
Usar una crema hidratante no comedogénica, que no obstruya los poros y proporcione la cantidad adecuada de humedad, como es el caso de Lotus & Spirulina Romance de Byoode, es ideal. Esta crema hidratante con textura mousse está cargada de antioxidantes provenientes del loto, la espirulina y el brócoli, omega 3 y ácido hialurónico.
Decir adiós a los poros negros y puntos negros es posible si seguimos estos tres pilares fundamentales: exfoliación, doble limpieza e hidratación. Al incorporar estos pasos en tu rutina diaria de cuidado de la piel, podrás mantener tus poros limpios y minimizar su apariencia, logrando una piel más clara y saludable. ¡Echa un vistazo al resto de productos de Byoode para completar tu rutina de belleza diaria!